Santo Domingo.- El bono navideño que entrega el Gobierno dominicano a familias de bajos recursos se ha expandido en su segundo año tanto en el número de beneficiarios, como en los beneficios aparejados al programa.
El subsidio, que se entrega en una tarjeta prepago con un saldo de 1.500 pesos, se repartió el año pasado a 1,2 millones de familias y este año se expande para alcanzar 1,7 millones de hogares, lo que supone una ayuda para llevar la cena navideña a un total de 4 millones de dominicanos.
Por decisión del Gobierno dominicano, el bono solo se puede usar en colmados, supermercados y grandes almacenes donde se expenden alimentos.
Promociones
Estos establecimientos son los responsables de que los beneficios del programa social hayan mejorado en este segundo año, ya que han comenzado a ofrecer descuentos u otras promociones a las personas que acuden a hacer sus compras con el bono navideño, explicó a Efe Gabriel Pascual, gerente general de Mastercard en República Dominicana, empresa que emite la tarjeta.
“Lo que hemos logrado como empresa, en conjunto con Banreservas y el Gobierno, es que un programa que antiguamente daba solo un beneficio, un beneficio de comida, se haya convertido en un programa que ofrece más beneficios para la persona que lo disfruta”, dijo el responsable de Mastercard.
Pascual dijo sentirse “orgulloso” de que el programa, de este modo, aporte un “granito de arena” a la reactivación de la economía dominicana, una de las que más crece de América Latina y el Caribe.
Pago sin contacto
La población dominicana ha acogido con “muchísimo agrado” el pago sin contacto, un sistema que ha llegado a superar el 20 % del total de las transacciones realizadas el año pasado con el bono navideño.
Este número es considerable, teniendo en cuenta que para muchas personas esta era la primera vez que usaban esta tecnología y, después de probarla, “han visto el valor” del sistema.
“A este público le agrada muchísimo pagar de manera sin contacto, por razones obvias- por no dejar el plástico en manos de otra persona y por el miedo a que le clonen o le roben la información del plástico. Por eso la inversión que hizo Mastercard en conjunto con Banreservas y el Estado dominicano en poner la última tecnología, lo último disponible, en un programa social del Gobierno”, subrayó.
En el conjunto del mercado dominicano, la penetración de los pagos sin contacto también ha ido en aumento de forma rápida, pasando del 10 % a principios de 2019, al 24 % en la actualidad, según la empresa.
Los usuarios del bono navideño, explicó Pascual, también adoptaron sin ningún inconveniente el sistema automatizado para activar la tarjeta, que se realiza por teléfono.
Esta es la primera vez que se puso en el mercado un sistema totalmente automatizado para un programa social del Gobierno y el público demostró que es capaz de autoservirse, valoró Pascual.
Medidas de seguridad
El bono navideño cuenta con las últimas tecnologías, las mismas que aplica Mastercard en sus tarjetas sin contacto, lo que incluye sistemas de encriptación que hacen imposible la duplicación del plástico o la suplantación de la identidad del usuario.
“Esa fábula de que la gente puede clonar y copiar tarjetas de última generación, con chip y sin contacto, así de fácil no es cierta”, garantizó Pascual.
Para usar el bono navideño, hay que acercar la tarjeta a menos de dos centímetros del terminal de pago y este debe estar activado previamente.
Además, el sistema de Mastercard no permite que el bono se use para compras remotas, sin la tarjeta presente, o en tiendas en internet.
Las medidas de seguridad incorporadas a la tarjeta han permitido que no se haya registrado ningún caso de clonación, ni en la Navidad pasada ni en la de este año.