La Policía Nacional prohibió a sus agentes y oficiales poner en libertad a individuos apresados por violentar horarios y normas establecidas contra el COVID-19 y el toque de queda, sin la anuencia del Ministerio Público.
El vocero de la PN, Miguel Balbuena, dijo que la iniciativa se aplica a nivel nacional y el propósito es ser estricto en el cumplimiento de las normas para salvar vidas.
Balbuena explicó a N Digital que la orden le fue comunicada de manera verbal a los comandantes regionales y departamentales, quienes a su vez, la transmitieron de manera escrita a sus subalternos.
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La medida está motivada, además, por las quejas de fiscales por la liberación de detenidos por violentar las medidas establecidas en el estado de emergencia nacional por el coronavirus.
“Se les ordena que, a partir de la fecha, queda terminantemente prohibido hacer entrega de personas detenidas por cualquier circunstancia relacionadas a la pandemia, violación al toque de queda, no uso de mascarillas y distanciamiento social, a militares, funcionarios u otros, sin la autorización del suscrito”, indica el director Regional Central del Distrito de la Policía Nacional, general de brigada José Antonio Bello, en memorándum 0758.
En tal sentido, ordenó que todos los detenidos deben ser puesto a disposición de los representantes del Ministerio Público de cada demarcación.
