Un apartamento vacante en Manhattan se alquilaba al mejor postor y los neoyorquinos se los disputaban a toda costa, al menos así era antes de la pandemia. Ahora, según el nuevo reporte de Miller Samuel y el gigante inmobiliario Douglas Elliman, más de 13, 000 unidades están vacías y la tendencia parece imparable.
Si bien los habitantes de la ciudad prefieren huir a los suburbios, los agentes inmobiliarios afirman que los beneficios serán para aquellos que se quedan, puesto que tendrán la oportunidad de negociar un alquiler más bajo.
Tanto en Manhattan como en Brooklyn, los nuevos contratos de arrendamiento han bajado casi un 25%. En el noroeste de Queens la cifra cayó en casi un asombroso 60%.
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